El gato fantasma

Hace mucho tiempo en una pequeña casa vivía una viejita llamada Ana ella sabía mucho de pociones, remedios, hierbas ella era una viejita muy sabia, ella era morena con el pelo negro y muy enredado. Un día cuando preparaba una de sus remedios un pequeño gato salto a una de sus sopas salto y sé quemó. Al día siguiente las nietas Paula y Blanca quisieron ir a visitar a su abuela. Blanca era pecosa y con pelo largo, Paula era un poco pequeña y muy curiosa. La abuelita estaba preocupada por el pobre gatito y quiso revivirlo preparo una poción para que el gatito pueda revivir trato y trato y el gatito revivió solo que era invisible como un fantasma esa noche era de luna llena. Cuando llegaron Paula y Blanca a la casa vieron que su abuela estaba muy triste, ellas le preguntaron abuela: -abuela por qué esta tan triste? La abuela les contestó: por ese pobre gatito se calló en la sopa y murió pero lo reviví y se vio igual que un fantasma. Cuando vieron al gato les dio pena pero podían hacer una poción que el gato volviera como era antes. Paula y Blanca fueron a comprar uno de los remedios al mercado cuando regresaron el gato ya no se veía como un gato fantasma se veía un poco raro el gato apuntaba a la luna con su garita su abuela pensó que venía de la luna pero la verdad era que él quería salir para buscar a su familia cuando prepararon él remedio el gatito volvió como era antes pero tenía que descansar un poco para que pueda volver cuando el pequeño gatito se tomó él remedio salió arrancando las nietas quisieron atraparlo pero no pudieron el gatito se había ido para siempre. Al día siguiente las nietas fueron a ver si el gatito estaba pero él nunca más lo volvieron a ver. Bitia Rivera